Accesorios caseros para perros
Un perro no sólo necesita amor y cuidados, sino también suficiente actividad y desafíos mentales. Sin embargo, los juguetes para perros de alta calidad pueden ser caros, y a menudo no se ajustan a las preferencias individuales de tu amigo de cuatro patas. Así que, ¿por qué no fabricar tú mismo juguetes para perros? Con un poco de creatividad, puedes fabricar tú mismo juguetes para perros adaptados a las necesidades de tu perro.
Tanto si buscas una alternativa sostenible a los juguetes comprados en la tienda como si simplemente disfrutas fabricando tus propios accesorios para perros, en este artículo encontrarás numerosas ideas de manualidades para perros, para interior y exterior. Desde sencillos juegos de masticar y buscar hasta juguetes interactivos, ¡todo está incluido! No sólo ahorrarás dinero, sino que mantendrás a tu perro ocupado de forma sana y significativa. ¡Déjate inspirar y descubre lo divertidos que pueden ser los juguetes creativos para perros!
Por qué es bueno jugar con tu perro
El juego motiva al perro por sí mismo y le ayuda a aliviar el estrés o la frustración. La elección de la técnica de juego y del juguete debe ser individualizada. Mientras que a algunos perros les encantan los juegos de presa, otros prefieren los de comida.
El juego como terapia
El juego puede dar energía a los perros deprimidos o mayores, ayudar a los perros jóvenes a aprender a autocontrolarse y dar a los perros ansiosos una sensación de seguridad. Los instintos de caza pueden exteriorizarse de forma controlada mediante los juegos de presa, en los que el perro se siente especialmente motivado por la privación selectiva. Además, los juegos de olfateo en particular son una actividad apropiada para la especie.
Riesgos y límites
No a todos los perros les gusta jugar; existen alternativas como los juegos con comida, a los que también hemos añadido algunos ejemplos a continuación. El juego demasiado salvaje puede convertirse en sobreexcitación o comportamiento de caza. Algunos perros ponen a prueba a su oponente durante el juego, lo que puede provocar conflictos.
Alfombra olfateadora

Una alfombra olfateadora es una forma sencilla pero muy eficaz de mantener a los perros mentalmente ocupados. Este juguete interactivo consiste en numerosas tiras de tela anudadas formando una alfombra antideslizante en la que se pueden esconder golosinas. El perro tiene que trabajar con su nariz para encontrar las golosinas ocultas, lo que fomenta la concentración y proporciona un ejercicio significativo. Especialmente para perros nerviosos o mayores, la alfombra olfateadora es una actividad relajante que también proporciona variedad en los días lluviosos.
Casera
Lo mejor de todo es que puedes fabricar fácilmente tu propia alfombra olfateadora. Necesitas una alfombrilla de goma antideslizante con agujeros, como las que hay disponibles como revestimientos de fregadero, así como restos de vellón u otras telas suaves. Las telas se cortan en tiras estrechas, se pasan por los agujeros de la alfombrilla y se anudan. Este proceso se repite hasta que toda la superficie esté densamente cubierta de tiras de tela. Dependiendo de la densidad de los trozos de tela, se ajusta la dificultad para el perro. En cuanto la alfombra esté terminada, se pueden esconder golosinas entre las tiras, y puede empezar la diversión del olfateo.
Como alternativa, también hay productos especiales en tiendas que puedes comprar rápidamente, o particulares que venden sus propias alfombras olfateadoras caseras.
Higiene
Para mantener la higiene de la alfombra durante mucho tiempo, hay que sacudirla con regularidad y lavarla si es necesario. Esta sencilla idea de bricolaje ofrece una magnífica oportunidad para desafiar a tu perro de forma lúdica y proporcionarle una actividad relajante.
Juego de la cáscara

El juego del cono es una forma sencilla pero entretenida de desafiar mentalmente a los perros y agudizar su olfato. El objetivo es que el perro utilice su olfato para averiguar bajo qué taza o cono se esconde una golosina. Este juego es especialmente adecuado para perros a los que les gusta olfatear y buscar, y puede jugarse tanto dentro como fuera de casa. Fomenta la concentración, la capacidad de resolver problemas y proporciona una actividad significativa.
Casero
Para hacer tú mismo el juego del cono, todo lo que necesitas son de tres a cinco tazas o cuencos pequeños que puedan volcarse o levantarse fácilmente. El primer paso es mostrar claramente al perro que hay una golosina debajo de una de las tazas y dejar que la huela. En cuanto haya comprendido que el objetivo es encontrar la golosina escondida, el juego puede hacerse más difícil cambiando las tazas o colocando varios conos sin recompensa. Entonces el perro puede intentar identificar el cono correcto olfateando o usando las patas.
Aumenta el nivel de dificultad
Para mantener la emoción del juego, la dificultad puede aumentar gradualmente. En lugar de simples tazas, pueden utilizarse conos más estables o las golosinas sólo pueden esconderse en determinadas rondas. Es importante que el perro tenga una sensación de logro a través del juego y se mantenga motivado. Con un poco de práctica, el juego de los conos se convierte en un gran reto que no sólo desafía mentalmente al perro, sino que también le divierte mucho.
Dispensador de aperitivos

Un dispensador de golosinas es un gran juguete interactivo que desafía mentalmente a los perros y les ofrece una pequeña recompensa al mismo tiempo. El perro tiene que hacer movimientos específicos para sacar comida o golosinas del dispensador, lo que no sólo fomenta la inteligencia, sino que también proporciona una actividad significativa. Un dispensador de golosinas es una forma estupenda de hacer que comer sea divertido, sobre todo para los perros que comen rápido o buscan un reto adicional.
Casero
Puedes fabricar fácilmente un dispensador de snacks tú mismo. Una botella de plástico vacía o una lata resistente con tapa, aunque el cartón también es ideal como base. Se hacen pequeños agujeros en los lados para que caigan las golosinas, lo bastante grandes para que salgan rodando, pero lo bastante pequeños para motivar al perro a jugar activamente. Luego se llena la botella o la lata con comida seca o golosinas pequeñas. El perro tiene que moverla con la pata o el hocico para que caigan los snacks.
Aumenta el nivel de dificultad
Para que el juego sea más emocionante, se puede personalizar la dificultad. Al principio se pueden utilizar agujeros más grandes o snacks que rueden con especial facilidad, mientras que las aberturas más pequeñas o los recipientes más pesados suponen un reto mayor para los perros más avanzados. El dispensador de snacks casero no sólo es una alternativa barata a los juguetes de inteligencia comprados en tiendas, sino que también ofrece una excelente oportunidad para desafiar mentalmente al perro y entrenar sus habilidades.
Juguete de rocío

Un juguete de cuerda es una forma sencilla y versátil de mantener a los perros ocupados jugando y fortalecer al mismo tiempo sus músculos masticadores. Es adecuado tanto para juegos de tira y afloja con el dueño como para ejercicios de recuperación o masticación. Es una actividad ideal, sobre todo para perros con una fuerte necesidad de masticar, y también puede ayudarles a limpiarse los dientes de forma natural.
Casero
Un juguete de cuerda es muy fácil de hacer tú mismo. Puedes utilizar tela vieja de camiseta, vellón o cuerda de algodón. La tela se corta en varias tiras largas y luego se trenza formando una trenza apretada o un nudo. Si quieres aumentar la dificultad, puedes hacer nudos a diferentes intervalos o trenzar varias tiras juntas para que el juguete sea más estable. Según el tamaño y la fuerza masticatoria del perro, la cuerda puede personalizarse.
Precaución
Para que el juguete de cuerda siga siendo seguro, hay que comprobar regularmente que no tenga hilos desgastados o sueltos, para evitar que el perro se trague partes. Tampoco debe dejarse desatendido, sobre todo si el perro tiende a desmontar los juguetes. Un juguete de cuerda casero es una alternativa sencilla, sostenible y barata a los productos comprados en tiendas, y ofrece al perro una forma estupenda de desahogarse.
¿Qué debes tener siempre en cuenta?
Al utilizar y fabricar juguetes interactivos como dispensadores de snacks, alfombras olfateadoras o juegos de conos, es especialmente importante prestar atención a la seguridad. Los perros nunca deben poder tragarse piezas pequeñas, por lo que hay que evitar los elementos sueltos o fácilmente desmontables. También deben comprobarse cuidadosamente y alisarse los bordes afilados o los materiales duros que puedan causar lesiones en la boca y las patas. Si se utilizan botellas o latas de plástico, es aconsejable asegurar las interfaces con cinta adhesiva o material blando. Los juguetes deben utilizarse siempre bajo supervisión para evitar riesgos como mordiscos o desmontaje. Los perros especialmente aficionados a masticar necesitan materiales robustos que resistan el juego. Las revisiones y la limpieza periódicas garantizan que el juguete siga siendo seguro y que el perro pueda jugar sin peligro.
Conclusión: diversión y actividad para todos
Los juguetes caseros para perros son una forma estupenda de mantenerlos ocupados y desarrollar sus habilidades mentales y físicas. Ya sea una alfombra olfateadora, un juego de conos, un dispensador de snacks o un juguete de cuerda, cada una de estas ideas ofrece un reto emocionante y refuerza el vínculo entre perro y dueño. Siempre es importante garantizar la seguridad para que no se traguen piezas pequeñas ni los bordes afilados se conviertan en un peligro. Con un poco de creatividad, puedes hacer juguetes sencillos, baratos y personalizados que entusiasmarán a tu perro y le aportarán variedad.
Fuentes y enlaces de interés
Roland Berger (2021). Hundespielzeug selber machen. BoD - Books on Demand
Schroll S, Dehasse J (2016). Hrsg. Verhaltensmedizin beim Hund. 2., überarbeitete und erweiterte Auflage. Enke Verlag.