Puede ser muy acogedor: tú con tu perro en el sofá. ¿O tu schnauzer gigante ya está ocupando el mejor sitio? ¿Es realmente tan malo dejar que tu perro se suba el sofá? ¿Y cómo puedes quitarle el hábito?
Dejar que el perro suba al sofá: ¿sí o no?
En primer lugar, no todos los perros que se acuestan en el sofá son ilimitadamente mimados o peligrosos. Y no todos los propietarios que lo permiten tienen un problema de control sobre el canino.
Hay muchos perros que se sientan tranquilamente junto a los suyos en el sofá y que nunca ocasionan el más mínimo problema. Entonces, ¿por qué debería estar prohibido?
- En la práctica, el sofá podría resultar dañado. Si tienes un cachorro, es posible que mordisquee el sofá o se afile las garras en él. Pero incluso un perro adulto y bien educado dejará pelos, suciedad y posiblemente marcas de arañazos.
- Puede que te moleste. Tu perro es grande, necesita mucho espacio, y tú no tienes suficiente espacio en el sofá. O tu pareja, los niños o las visitas ya no caben cuando el perro se extiende.
- Los perros que son muy seguros de sí mismos, que te limitan a ti y a las visitas, que se creen los amos de la casa, tienen que aprender que la casa no les pertenece a ellos, sino a ti. Aquí puede ser muy útil para la educación prohibir al perro ciertos lugares, por ejemplo el sofá.

¿Cómo quitarle al perro la costumbre de subirse al sofá?
Ahora, por supuesto, surge la siguiente pregunta: ¿cómo le enseño al perro que ya no está permitido que se suba al sofá? ¿Cómo le dejo claro que solo puede subirse al sofá cuando yo lo autorice?
- Muéstrate seguro de ti mismo. Si mantienes tu posición firme, la sostendrás en el tiempo y serás capaz de hacerle llegar el mensaje al perro. Si no estás seguro de ti mismo, lo tendrás de vuelta en el sofá en un abrir y cerrar de ojos.
- Empieza pronto. Cuando el cachorro recién llega a tu vida y al apartamento, primero prueba lo que se le permite y lo que no. Si en esta etapa le enseñas constantemente que el sofá está prohibido para él, bajándolo con un "no" tranquilo, aprenderá la lección rápida y fácilmente. Cambiar un comportamiento que antes estaba permitido es mucho más difícil.
- Establece una orden como "abajo". Di la orden y, al mismo tiempo, atrae al animal fuera del sofá con una golosina. Elógialo mucho y dale la golosina. Practica esto durante un tiempo. No le regañes cuando se suba al sofá, pero elógiale cuando te haga caso.
- Proporciona un lugar alternativo cómodo para tu perro: una manta, un almohadón suave, una cama o algo que huela a ti o que sea agradable para el perro.
- Intenta que el sofá sea más incómodo para el perro, al menos si no quieres que suba allí. Poner una barrera para bebés alrededor, poner papel craquelado sobre el mueble, cualquier cosa con la que el perro no pueda hacerse daño, pero que haga que el sofá sea poco atractivo para él.
Lo más importante es ser constante. Es más fácil para tu perro entender que ahora menos cosas están permitadas si eres constante que si no sabe qué esperar de la situación.