Vaya, acabas de volver de un paseo, tu perro sale del coche y cojea delante de ti hasta la puerta principal. ¿Qué puede ser?
Causa 1: un objeto extraño se le ha atascado en la pata
Es posible que tu perro haya alojado piedras, pedazos de plantas o trozos de madera entre las almohadillas durante el paseo. Y también es muy posible que el perro ni siquiera se haya dando cuenta en la caminata, porque estaba muy ocupado oliendo y explorando el entorno. Únicamente en el coche o ya en casa ha empezado a notar una sensación desagradable.
Entonces, el perro empieza a cojear, porque el cuerpo extraño le raspa, le pica o le causa dolor por presión.
En invierno, se forman cúmulos de hielo y nieve entre las almohadillas de algunos perros. Esto es especialmente cierto si el perro tiene el pelo más largo en las patas, debido a su raza. Si se recorta el exceso de pelaje con regularidad, se puede evitar este fenómeno hasta cierto punto.
Examina las patas y avanza tanteando poco a poco. Ten cuidado, porque si la causa es otra, tu amigo de cuatro patas puede estar experimentando mucho dolor.
Si hay algo pegajoso (chicle, savia de árbol), hay que cortarlo con cuidado. Es mejor no utilizar tijeras puntiagudas, sino redondeadas. Si tu perro se asusta o se asusta durante el corte, usando unas tijeras romas el riesgo de lesiones disminuye para ambos.

Causa 2: una lesión aguda le causa dolor
Detrás de una aparición repentina de cojera pueden estar estas lesiones:
- Cortes
- Moretones
- Esguinces
- Lesiones e inflamaciones de los tendones
- Bursitis
- Moretones
- Rotura de fibras musculares
- Lesiones en la columna vertebral
- Traumas
- Fracturas óseas.
En el caso de las heridas abiertas y sangrantes, se recomienda un tratarla inicialmente con spray desinfectante o enjuagarla con agua limpia. Puedes dejar que los pequeños cortes se curen solos.
Los hematomas y los esguinces pueden desaparecer por sí solos tras unos días de reposo.
En cuanto notes signos de dolor fuerte en tu perro, debes acudir al veterinario. Lo mismo ocurre si una herida sangra mucho, no se puede ver si hay un cuerpo extraño en ella o la herida está infectada.

Causa 3: una enfermedad crónica del sistema musculoesquelético
La artrosis y otras enfermedades degenerativas se desarrollan principalmente en la vejez. En los perros grandes o con una complexión poco habitual, los signos de desgaste aparecen un poco antes.
Normalmente, la artrosis sigue su curso. Esto significa que tu perro cojea poco después de levantarse de una posición de reposo y su marcha se normaliza una vez que entra en calor.
Tu perro también puede cojear si tiene displasia de cadera. Se trata de una enfermedad hereditaria que es más común en ciertas razas.
Existen otras afecciones crónicas o degenerativas en los perros que se asocian a la cojera:
- Osteoartritis
- Espondilosis
- Síndrome de cauda equina
- Inflamación articular causada por parásitos (por ejemplo, Borrelia)
- Atrofia muscular
- Tumores
Por supuesto, si tu perro cojea, está cojo o tiene mucho dolor, debes acudir al veterinario lo antes posible para que le haga una revisión exhaustiva.